Resulta que voy a hacer una visita a mi sobrino, y a la vuelta me encuentro con esto... Una pareja de gatos haciendo de okupas en mi coche.
Si es el típico gilipollas con el vaso apoyado en el coche, es muy probable que sin mediar palabra le rompa la cara, pero cuando hablamos de animales... lo siento, no puedo, porque se bajaron ellos sólos, si no me los llevo ahí puestos, con un par...! volver cuando queráis.